¡No te lleves mis tacones! La pesadilla de una bailarina de salsa

"¿Cuándo puedo comenzar a bailar de nuevo?" preguntó el bailarín de salsa.

"¡Tan pronto como renuncies a esos zapatos de tacón alto!" Respondí.

Ella me miró con frialdad. Sé que no debería haberlo dicho. Sé que esta batalla no se puede ganar.

Esto probablemente no te sorprenderá: no puedes decirle a una bailarina de salsa que no puede usar zapatos "lindos". Independientemente de lo duros que sean los pies y el daño que le causen a estas estructuras críticas, una mujer seguirá insistiendo en usar sus 5 "Jimmy Choos", porque no son solo zapatos. Son parte integral de la experiencia de salsa.

Los zapatos son un componente tan importante del baile que muchas mujeres continuarán usándolos a través del intenso dolor, sabiendo al mismo tiempo que su elección de calzado los llevará a una cirugía inevitable en los años siguientes. Por lo tanto, es inútil tratar de convencerlos de probar un zapato diferente. En cambio, prefiero centrarme en lo que podemos controlar: sus efectos secundarios implacables.

El problema con los zapatos de tacón alto no es que necesariamente porque una condición para ocurrir. Sin embargo, pueden empeorar una condición desapercibida o leve y, en muchos casos, intolerable. Debido a que la fuerza del cuerpo se aplica a los metatarsos y los dedos de los pies, comúnmente vemos bailarinas con callos duros y callos, juanetes, dedos en martillo, neuromas y espolones óseos de los dedos de los pies. La triste verdad es esta: los zapatos de tacón alto empeorarán cualquiera de las condiciones antes mencionadas. Por lo tanto, si no desea renunciar a sus zapatos, debe estar preparado para manejar los síntomas u optar por un procedimiento quirúrgico ambulatorio para corregir la estructura desalineada.

Algunas cosas que puede hacer para el mantenimiento:

Registre sus callos y callos – Con callos y callos, el mantenimiento es la clave. Afeitarlos regularmente para que no se vuelvan dolorosos, pero asegúrese de dejar algo del callo. Recuerde: la razón por la cual su cuerpo produce un callo es para proteger la piel de la fricción. Puede intentarlo usted mismo o ver a su podiatra, quien reducirá la cantidad correcta.

Invierta en Moleskin – Moleskin con un respaldo adhesivo se puede comprar en su farmacia local. Úselo para evitar que los dedos de los pies se presionen juntos o que se froten contra los costados de sus zapatos. Coloque este moleskin en los "puntos de acceso", y vea si experimenta algún alivio. La parte superior de los dedos de los pies es otro lugar donde moleskin puede ser eficaz.

Practica en pisos de Jazz – Si bien los planos de jazz presentan sus propios problemas (como la fascitis plantar debido a la falta de soporte en el arco), pueden mantener la presión constante fuera de los dedos de los pies. Dependiendo de sus condiciones específicas, considere cambiar entre tacones y zapatillas de jazz mientras practica.

Use sus ortesis – Cuando esté fuera del piso, asegúrese de usar un zapato bien apoyado con un accesorio ortopédico personalizado. Colocar los pies en una posición ideal mientras no está bailando puede ayudar a su condición general cuando la presión está activada.

Gran parte de encontrar una solución para un bailarín (sin ver a un médico) implica ensayo y error. Mientras busca su mejor solución que lo mantenga en el piso, recuerde que el dolor es la manera en que su cuerpo le dice que algo anda mal. Si no aborda el problema, empeorará. Su mejor opción es buscar asesoramiento médico profesional si la afección no se cura o se vuelve crónica. Muchos bailarines evitan ver a un profesional porque temen la palabra "cirugía". Este miedo es, sin embargo, irracional. Los procedimientos médicos podológicos han avanzado significativamente en los últimos años. La mayoría de las cirugías para problemas relacionados con la danza (si se tratan temprano) son menores y pueden requerir una sola sutura. Consulte a un podiatra para una consulta (muchos ofrecen este servicio de forma gratuita). ¡El conocimiento que obtienes puede salvar tu carrera de baile!